¿Qué mejor forma de empezar el mes del terror que con una de mis sagas favoritas del género? Con motivo del estreno de su última entrega, Romulus, me ha parecido la ocasión perfecta para revisitar esta GRAN saga, la cual analicé hace muchos años y se merecía mejores análisis. Tras haber revisitado la trilogía, ha llegado el momento de la cuarta entrega, la "resurrección" de Ripley y los Xenoformos (entrega que disfruto como un pequeño cada vez que la veo, debo confesarlo). El encargado de componer su Banda Sonora es John Frizzell. Como siempre, solo tenéis que hacer clic en la imagen de abajo para leer el nuevo análisis que he escrito.
John Frizzell hizo un GRAN trabajo con esta cuarta entrega, ofreciéndonos un conjunto sobresaliente con un estilo MUY destacable (nos encontramos ante una obra serena y majestuosa, pero también oscura e inquietante, aunque también un poco dramática... En serio, todos estos elementos se combinan de la MEJOR forma posible a lo largo de toda la obra). Mención aparte merece el tema principal de la obra, el cual logra sonar con una FUERZA realmente destacable. Una vez revisitadas las cuatro primeras entregas de la saga (sus ediciones especiales y ampliadas ya serán revisitadas en otra ocasión), tocaría Prometheus (la precuela de la saga que se estrenó en 2012) si continuamos con las películas. Sin embargo, ¿Qué os parece si dejamos estas últimas películas para más adelante y nos adentramos primero en los juegos ambientados en la saga? A partir de mañana lo averiguaréis...
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