Con el lanzamiento de Jurassic World: Dominion, me parece la ocasión perfecta para revisar esta trilogía jurásica (y no reviso la trilogía de Jurassic Park por falta de tiempo, pero en un futuro lo haré). Tras re-analizar la primera entrega, pasamos a la segunda. El sueño de John Hammond resultó en desastre y los dinosaurios viven ahora libres en la Isla Nublar. Sin embargo, el volcán de la isla vuelve a estar activo y hay que intentar salvar a todos cuanto se puedan... El encargado de componer la BSO de esta segunda entrega volvió a ser Michael Giacchino. Aunque el análisis no es tan "antiguo" como el de la primera parte, he querido hacer una entrada mejor. Como siempre, podréis leer el nuevo análisis si hacéis clic sobre la portada de abajo.
Debo confesar que esta es una obra que me ha ganado con el paso del tiempo. Aunque me gustó mucho en su día y siempre he considerado que se trataba de un trabajo notable y sólido, ahora me gusta MUCHO más. Nos encontramos ante una obra que, pese a no ser tan "original" como la primera parte (lo escribo entre comillas porque no es algo malo), sí que sabe como ampliar y desarrollar sus características de la MEJOR manera posible. Además, los nuevos temas principales, aunque menos abundantes, logran estar a la altura y ofrecernos momentos que son casi sobrecogedores (en serio, el uso de los coros resulta MAGNÍFICO a veces). Creo que, en términos generales, esta es la obra más oscura e inquietante de la saga (hay partes que casi parecen sacadas de una película de terror), y eso me ha gustado MUCHO (dota de mucha personalidad a la obra). Tras las dos primeras entregas de esta nueva trilogía, ha llegado el momento de disfrutar de la tercera película y el final de una era jurásica...
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