Con motivo del lanzamiento de la quinta entrega de la saga (y de la BSO de la cuarta de forma oficial, ¡¡Por fin!!), me ha parecido el momento perfecta para revisitar una de las sagas más características de Joseph Bishara (y, en las primeras entregas, James Wan). Aunque ya analicé esta saga en su momento (incluyendo un disco extra con música descartada), no he podido resistirme a re-escribirla para ofrecer entradas a la altura de su verdadera calidad (os adelanto que mi opinión hacia la música de esta saga ha cambiado con el paso del tiempo, ¡¡Y ha sido para bien!!). Como siempre, solo tenéis que hacer clic sobre la imagen de abajo para ir al nuevo análisis.
Como dije en la presentación del re-análisis de la primera entrega, esta saga no me terminó de convencer en su momento (no me parecía mala, pero en su momento era más extremista con los estilos más ambientales, musicalmente hablando, y por eso esta no me convenció tanto). Sin embargo, revisitarla de cara a la nueva entrega después de años ha servido para darme cuenta de todo su potencial (ha pasado de no parecerme gran cosa a gustarme ¡¡Y MUCHO!!). Esta segunda entrega mantiene las mismas características de la primera y las desarrolla de la MEJOR forma posible. En términos generales, esta obra resulta más oscura que la primera (quizá esto sea porque las partes más emotivas y dramáticas no son tan abundantes... De hecho, quizá este sea el motivo por el cual no me ha gustado tanto, dentro de que me parece que sigue siendo un trabajo MUY notable). Las partes más "fantasmales" y angustiosas se desarrollan de la MEJOR manera posible. Tras la segunda entrega, la saga viajó al pasado con su tercera entrega (esta era una precuela de las dos primeras), la cual revisitaremos mañana...
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